YEGUA EN LIBERTAD

Descripción del servicio

Estar con este animal majestuoso desde la escucha mutua, desarrollando así juntos la confianza necesaria para, libremente y a su ritmo, dejarse tocar, acicalar, estar cerquita o ir al son sin presión ni dolor alguno, en la armonía de simplemente estar a gusto. Ella es pura escucha, sensibilidad, dignidad y cortesía, y os brinda la oportunidad de uniros a su suave magia, a su lenguaje exquisito, y sentiros con ella uno. La calma, presencia y el estado meditativo que este estar juntos aflora nos trae preciosamente a nuestro centro y a una conexión con la naturaleza, la tierra, las estrellas y el sol muy profunda a la par que sencilísima y alegre. El poder comunicarse, escuchar, transmitir, sin palabras, en silencio, resulta tal gran caricia, especialmente en estos tiempos tan llenos en ocasiones de ruido. A Valentía le encantará hacer paseos cortos o bien uno largo de día entero con una parada a comer junto a alguna poza preciosa del río u otro lugar bellísimo y acogedor que escojáis. Si vienen los niños, que se fascinan con todo por el camino, la marcha no la esperéis muy rápida... mas sí muy jugosa, maravillosa y enriquecedora. Podréis elegir entre paseos cortos, de 1 o 2 h, como por el castañar, otros más largos, de la mañana entera, con descanso en el bello río Genal, y otros de día entero con (posible) chapuzón en paraje de ensueño, comida riquísima y siesta... próximamente más detalles. Entonces os preparamos el día a medida según las ganas de caminar o no, bien solo en la finca, bien explorando más allá, o bien mucho más allá. Y poniendo a vuestra disposición, si así lo eligierais, un coche escoba, para facilitar algunos tramos o la vuelta si mayores o pequeños estáis cansados.